Todos nos equivocamos
Alguna vez, y muchas veces
más…
Pero, ayer confié y ¡vamos!
Volviste a caer una vez más…
La tentación fue servida
Y no pasaron sino minutos,
Para volver a querellas sin
salida…
Querellas que no dan ni
susto.
Una vez me dijiste: “no lo volveré
a hacer”
Tonto de mí, que te creí…
¿Pero qué puedo hacer?
Eres falible, tanto como yo…
pero te creí…
Pensaba que eras más fuerte
Que tu brazo no darías a
torcer,
Creí que eras valiente,
Pero a la final te dejaste
corromper…
Fue tonto, y lo sabes…
Pero, te escudas ante supuestos,
Que sabes que son fugaces,
Son solo supuestos, nada
más que eso.
Y entonces deja que tu
mente
Navegue por un valle de
lágrimas y dolor,
Para a la final corromperte
Y hacer de ti un simple
eslabón…
Confié, y me equivoqué de
corazón…
Habrá que empezar de nuevo
otra vez,
Quizás por eso el hombre
inventó el perdón…
Para poder fallar una y
otra vez…
Confié y lo haré de nuevo,
Pero ya no será igual que
antes…
Será adiós, o hasta luego…
Pero, seguro… nada será
igual que antes…
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