Aunque esté triste, estás conmigo,
Te sientas junto a mí y me animas,
Al abrazarte olvido el frío,
Donde voy junto a mi caminas.
Cuando me voy triste te quedas,
Pero tranquilo, volveré,
Para jugar con las pelotas
Y a correr, hasta atardecer.
Si me caigo vas a buscarme,
Te sientas a mi lado, esperas,
Viendo lo que pudo pasarme,
No te mueves, no desesperas.
Y luego, seguimos jugando,
No paramos, ambos contentos,
Cualquier traspié será olvidado,
Y al fin en el césped tendernos.
Agua fresca en tu bebedero,
Me miras y me lo agradeces,
Me quedo a tu lado y espero,
Pues mi amigo, te lo mereces.
Por siempre eres mi amigo fiel,
Compañero en lo bueno y malo,
Haces todo porque esté bien,
Ni un instante contigo es vano.
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